miércoles, 23 de febrero de 2011

NI IDEA

                             "LAS DOS CENTELLAS", óleo sobre lienzo, 55 x 46 cm

"La idea está ya agotada, ya no sirve para nada [...] Es como el papel de plata, que ya no puede alisarse una vez que ha sido arrugado.

                                                                          Ludwig Wittgenstein.
                                                                                            Observaciones, 1931

lunes, 21 de febrero de 2011

IDEAS QUE SE QUEDAN EN LA MONTAÑA.

                          "La cordillera" Óleo sobre lienzo y metal, 89 x 34 cm.


   Cuando el diligente Peter Gast [ músico y amigo a quien Nietzsche había pedido que transcribiera su borrador] devuelve a Nietzsche su manuscrito copiado, corregido e incluso con algunas notas sugiriéndole cambiar o reducir determinados párrafos, éste le escribe:

   "El manuscrito que usted recibió de Saint Moritz ha sido comprado tan duramente y tan caro, que quizá nadie que hubiera podido evitarlo lo hubiera escrito a este precio. Al leerlo, especialmente los párrafos más largos, me horrorizo a menudo con el terrible recuerdo. Todo, con excepción de algunas pocas líneas, ha sido pensado mientras paseaba, y esquematizado con lápiz en seis pequeños cuadernos: el pasarlo a limpio me ponía enfermo casi siempre.

   Unas veinte sucesiones de pensamientos, desgraciadamente muy esenciales, he tenido que dejarlas escapar, porque no encontré tiempo bastante para extraerlas de los ilegibles garabatos a lápiz, tal como ya me sucedió el verano pasado.
 
   Después pierdo de la memoria la concatenación de los pensamientos: y es que tengo que hurtar a un cerebro doliente, a esa 'energía del cerebro' de la que usted habla los minutos y los cuartos de hora. A veces siento que no podría volver a hacerlo. Leo su copia y me resulta extremadamente difícil comprenderme a mí mismo, tan cansada está mi cabeza."

(Del prólogo de E. López Castellón a "EL CAMINANTE Y SU SOMBRA"  de F. Nietzsche.)


viernes, 18 de febrero de 2011

ARÁCNIDOS DE ESTUDIO.



Me gusta esta parte del trabajo, donde los cuadros son una construcción de artesano y uno tiene que concentrar todo el ingenio en asuntos relativos al orden de la materia: alinear, medir, serrar, encolar, apretar, esperar y ver.

No es tiempo perdido para la pintura, son pausas constructivas en las dos acepciones de la palabra. Por lo mismo, prefiero el óleo, que tarda en secar, al acrílico que seca en minutos. Da más tiempo para modificar, tiene más estados intermedios con su textura particular...te obliga a ampliar el tiempo. Mejor, las prisas son malas.

Y ahí cuelgo el cuadro encolándose al bastidor, con esa especie de patas de araña, presionando, presionando, concentrando la fuerza acumulada en el tornillo...en cierto modo es una escultura temporal. Podría dejarla así...

martes, 15 de febrero de 2011

FLEDERMAUS UND PORZELLAN

                                          "Volador", óleo sobre metal, 18 x 37 cm

 
...durchzuckts die Luft, wie wenn ein Sprung
durch eine Tasse geht . So reißt die Spur
der Fledermaus durchs  Porzellan des Abends.

Rainer Maria Rilke, Duineser Elegien, Die achte Elegie

...cruza en zigzag el aire, como grieta
que recorre una taza. Así es como la huella del murciélago
hiende la porcelana del atardecer.

Rainer Maria Rilke,Elegías de Duino, Octava elegía.
Poesía Hiperión, traducción de Jenaro Talens.

sábado, 12 de febrero de 2011

YA TENEMOS DE TODO

                          "Lagos y montes", óleo sobre lienzo y chapa de acero, 97 x 50 cm.


Aquela senhora tem um piano
Que é agradável, mais nâo é o correr dos ríos
Nem o murmúrio que as árvores fazem...

Para que é preciso ter um piano?
O melhor é ter ouvidos
E amar a Natureza.

F. Pessoa, Poemas de Alberto Caeiro, "O guardador de rebanhos", poema XI
 

domingo, 6 de febrero de 2011

EL TEDIO COTIZA LOS DOMINGOS



Leo en un artículo del dominical de El País -el artículo es de Javier Cercas y como todos los suyos, no despierta mayormente mi interés- un poema de Jacques Prévert que me parece muy brillante:

"Aquellos que se mueren de aburrimiento el domingo por la tarde
porque ven que les queda por delante el lunes
y el martes, y el miércoles, y el jueves y el viernes
y el sábado
y el domingo por la tarde "

Creo que esa sensación de desangelado tufo laboral que provoca la rueda perpetua de la semana tiene que ver con algo que señalaba ese magnífico francotirador del pensamiento, Agustín García Calvo, en un texto  de hace muchos años: la semana es, de entre todos los ciclos temporales que usamos habitualmente (día, mes, estación del año, el año mismo...) el más artificial, carente de vinculación con los ciclos naturales y relacionado directamente con el de producción/descanso que la cultura del trabajo asalariado ha impuesto desde sus orígenes.

Dos días de vida, cinco días de vacío; y esos dos días contaminados de obligatoriedad. Es preciso divertirse...¿cómo podría uno atreverse a malgastar esa parte del salario?

Y cuando no producimos diversión, nos asalta el pavor a la bancarrota del tedio,  amargándonos las tardes domingueras con esa especie de desalentadora conciencia de estar llevando a cabo una y otra vez  la inversión más ruinosa que un economista de la felicidad pudiese contemplar.