miércoles, 19 de noviembre de 2008

EL NIÑO SANTO



"El Niño Santo"; óleo sobre lienzo; 100 x 81 cm
Fotografiado por Genaro Martínez Castro

(Fragmento)

En ese espacio fosco cruzado por los pájaros
germina un resplandor entre humedad perpetua
y eternamente nace, fácilmente
el niño luminoso que lleva entre sus manos
la rueda de los días.

Callado lo contemplo: se viene la raposa
a curiosear sin ruido. Su silueta rojiza
rodea el resplandor. Enseguida se escurre
más allá de mi asombro entre un graznar de cuervos.

3 comentarios:

Annie dijo...

Es el silencio como un largo y tranquilo silencio... Plasmas susurros para este niño, Santo... Santo... es mejor que sea solo pintura, es mejor que no sea educado por los sonambulos...
Tiene el sosiego de un Buda...

La piedra imán dijo...

Gracias, Anita; lo pinté para que trajera consuelo a la mirada de quienes lo vieran. Y el pobre tuvo una vida ajetreada. Lo compró un hombre para regalárselo a su mujer, a la que adoraba. Pero se separaron, en muy malas circunstancias, y el hombre regreso a su antigua casa y se llevó el cuadro bajo el brazo, por la calle y sin embalar. Teniendo en cuenta que mide un metro por ochenta y ún centímetros, tiene su mérito. Espero que quien me lo compró y el Niño descansen ahora de forma plácida y se den consuelo y felicidad mutua...qué cosas!

Annie dijo...

Interesante historia... el hermoso niño santo sosiego de buda, si ha vivido entre sonambulos que se separan pero, será acaso que este caballero (que te compro el cuadro)ha despertado ¿?... le acompaña un Santo y no es de Iglesia... Su cara da consuelo, a mi me da consuelo.... :) No me des gracias y menos cuando lo que has hecho es para ayudar a otros...
Pintas calma engendrando santos de la tinta...
Takk... (gracias en Islandes)