martes, 31 de agosto de 2010

AÑORANZA Y TAXIDERMIA

Foto José Espona. Museo de Historia Natural de Berlín.

Esa mirada -esa imitación de una mirada-  me hace recordar un pecio de Ferlosio que decía algo así como: "Aún muerta y colgada de un gancho conservaba la liebre toda su dignidad".

4 comentarios:

Txomin Goitibera dijo...

En realidad la indignidad es la del taxidermista.

¿Y las taxidermias arquitectónicas? Como si fachada e interior pudieran disociarse alegremente, como si tal cosa.

la piedra imán dijo...

En la arquitectura de relumbrón el espacio interior se gasta como los cohetes de feria: básicamente en impresionar a los turistas.

Lucía dijo...

Vaya yo por la foto crei que era un canguro... sera por la dignidad esa.... Otro museo que me perdi cuando estuve en Berlin, a ver si dejas de darme envidia.

la piedra imán dijo...

El museo no era gran cosa, era más bien algo didáctico...un beso.