domingo, 8 de mayo de 2011

BUXO

El otro día entre en la caseta de una antigua finca abandonada. Su dueño murió hace mas de quince años y nadie ha vuelto por allí. La puerta había sido derribada por un grupo de hiphoperos que se han dedicado a pintarrajear los muros de bloque -y hasta algún árbol, los muy cretinos-  con esos letreros tan, tan originales que ahora uniformizan hasta el hastío las paredes de cualquier paisaje urbano del mundo.

Dentro ví sólo basura, herramientas inservibles, cuerdas enredadas, maderas que se amontonaban pudriéndose...Pero en un rincón había algo que me llamó la atención: unos troncos de corteza levemente rugosa, cuyo corte, a pesar del polvo y las telarañas, mostraba un color amarillento, cálido, como de marfil, que reconocí al momento. Era una partida de leños de boj, algo más de una docena. Y algunos bastante gruesos.

Quien conozca la madera sabe que eso es un tesoro. Un tesoro que cualquier hipotético tarugo que entrase allí como entré yo utilizaría para quemar, sin tener en cuenta que en cada uno de los  anillos que apretándose conforman su materia  hay un año de terco, lentísimo crecimiento.

Ahora ya no habrá hoguera. Están conmigo en el estudio. Voy a pulirlos uno por uno para buscarles la luz que tienen; una luz que puede entrar por los dedos. Eso sí que es fuego eterno, fuego del bueno.

4 comentarios:

Txomin Goitibera dijo...

Enhorabuena por el hallazgo.

Entre las muchas propiedades del boj, está la de su caracter compacto, su alta densidad y por tanto, su bajo índice higroscópico, le afecta poco la humedad y por eso es una madera ideal para la construcción de instrumentos de viento.

Antes de que empezase a llegar ébano de importación, los txistus se hacían de boj precisamente. Estoy seguro de que más de una gaita se habrá fabricado en buxo Aún queda algún artesano en Álava y el la Rioja que constrye "gaitas" (que es como allí llaman a las dulzainas) con esa madera. Es una auténtica maravilla y tiene un veteado fabuloso.

En euskera se dide "ezpel". El topónimo y el apellido Ezpeleta significan bosque de boj... o si prefieres, Buxedo.

Un saludo y disfruta de la madera.

La Piedra Imán dijo...

Las gaitas tradicionales siempre han sido de buxo. Las de ébano -que también las hay- son más bien una mariconada de virtuoso.

Recuerdo cómo busqué por la Puebla do Caramiñal a un artesano constructor de gaitas. Cuando preguntaba a las personas que asomaban la cabeza por las ventanas por el gaiteiro, respondían "¿Doen?" (¿duelen?). Y es que el artesano, que debía ser un genio de aldea,se ganaba la vida como sacamuelas.

Ah! y la peonza o trompo, se llama en gallego "buxaina", por la madera en que esta torneada. Aunque los niños coruñeses castellanizábamos la palabra pronunciando "bujaina".

Y como es tan dura y de grano uniforme, de madera de boj son los tacos pra xilografía. Y los chifres (sibatos) de afilador.

Tempero dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Tempero dijo...

Los hallazgos son tercos y azarosos en su espera.
Una preciosidad esos canales con que los has 'vivido'.